lunes, 29 de marzo de 2010

El compromiso


A pesar de haber renunciado a creer, ayer, después de mucho tiempo de no haber podido establecer una "configuración emocional" adecuada para enfrentarme al mundo, volví a creer en que el comprometerse es uno de los mejores estados a los que puede acceder el hombre.

Una vez lo dijo un filósofo, pero, ahora me atrevo a completarlo.

Este compromiso es válido siempre y cuando apunte en una única dirección, en la de ser feliz personalmente.

Ayer lo pensé gracias a una amiga, la más hermosa que tengo, y en sí, lo más hermoso que tengo en mi vida, y no sólo es esto verdad porque realmente sea ella lo único que tengo en mi vida, sino porque ayer descubrí patentemente que todos mis prejuicios acerca de muchas cosas estaban errados. Ayer abrí mi mente de una nueva manera hacia ella. Ahora no puedo más que creer que es lo más hermoso, no sólo que tengo ahora, sino lo más hermoso que he visto en mi vida.

Tal vez la ame en algún momento, pero la diferencia que hay entre yo y los demás, es que yo no voy a pedirle nada.

No quiero que mi inteligencia vuelva a traicionarme...

Hoy me sentí en Alemania; por primera vez descubrí que "Alemania" es un lugar dentro de mi, no es un país que exista sin que yo lo piense, "Alemania" es un estado de ánimo maravilloso el cual descubrí en un país llamado Alemania, el problema radicaba en que aun cuando yo pudiera haber sido consciente de esto, no habría podido dilucidar qué cosas son las que me hacían sentir como me sentía; de hecho me aterró en algún momento pensar en que si no estaba en Alemania no sería feliz. Pues ayer en la mañana las montañas, el frío, el sentirme en paz por no tener más cierto "tumor encarnado en mi corazón", me hicieron sentirme en "Alemania".

No era ella, ni su país, ni su cultura, ni su familia, ni su manera de tocar. Todo eso estaba dentro de mi alma. Yo soy eso. Yo puedo ser absolutamente feliz.

Toda esa búsqueda por profundizar con alguien hasta llegar a niveles insospechados...

Voy a poner eso en stand by. Me conformo con ver sus ojos, su sonrisa de niña, su cabello revuelto por el aire, sus manos tan hermosas, sus labios los cuales muero por morder. Por lo pronto, me embruja el soñar "pronto la voy a ver nuevamente"

Adiós. Adiós.

No hay comentarios:

Publicar un comentario